Transparencia Venezuela, 5 de mayo de 2023.- En los tribunales de Estados Unidos el empresario Samark López Bello ha intentado de todo: el desbloqueo de sus bienes, que saquen de la lista negra de los más buscados- en la que figura junto con Tareck El Aissami– y, recientemente, que desechen los cargos en su contra y que le quiten el estatus de fugitivo.
Las autoridades estadounidenses sostienen que López Bello es el presunto testaferro del ahora exministro del Petróleo, Tareck El Aissami, de quien no se sabe mucho en Venezuela desde su renuncia, salvo una declaración que soltó algún diputado sobre una investigación en su contra en medio de la ola de detenciones de funcionarios. Esto sin que la versión haya sido confirmada por la Fiscalía de Tarek William Saab. Aún.
Los cargos que el empresario ligado a El Aissami pidió, en septiembre de 2022, que se descartaran fueron presentados por la Fiscalía en una acusación sustitutiva el 13 de marzo de 2020. Allí se alega que desde febrero de 2017 hasta marzo de 2019 “López Bello y otros conspiraron para defraudar a la OFAC, violar y evadir sanciones de la OFAC, y lavar fondos utilizados en transacciones que violaban dichas sanciones”.
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Entre otras cosas López Bello pidió al tribunal que revisaran su casos porque él supuestamente “no entra dentro de la clase de personas imputables en virtud de la Ley Kingpin”, que establece sanciones económicas contra los principales narcotraficantes internacionales o capos de las drogas. También manifestó que la Fiscalía “no ha alegado adecuadamente” la conspiración de la que se le acusa.
Samark López sigue siendo un fugitivo
El juez de distrito, en Nueva York, Alvin k. Hellerstein, afirmó en su decisión que Samark López Bello es un fugitivo “que se enteró de los cargos en su contra mientras estaba fuera de los Estados Unidos y ahora se niega a regresar para evitar ser procesado”.
Para ratificar este estatus del empresario ligado a El Aissami se lee en el fallo que antes de ser sancionado por la OFAC febrero de 2017, “López Bello vivía en los Estados Unidos con la intención de convertirlo en su hogar permanente. Matriculó a sus hijos en escuelas estadounidenses, poseía propiedades en Estados Unidos y llevaba una vida lujosa aquí”.
El empresario venezolano es señalado porque “supuestamente utilizó compañías con sede en los Estados Unidos para fletar vuelos privados, involucrando a veces aeronaves registradas en los Estados Unidos, y pagó por vuelos privados utilizando a asociados para entregar dinero en efectivo en Venezuela para introducirlo de contrabando en Estados Unidos.”
El juez señaló que aunque López Bello no se encontraba en los Estados Unidos en el momento de la acusación, “las transacciones y tratos evasivos” fueron hechas en territorio estadounidense.
El tribunal también descartó lo que argumentaba el empresario venezolano sobre la debilidad de la acusación por conspiración presentada por la Fiscalía, pues el juez explicó que no se trata solo de la posibilidad de un fraude sino de “cualquier conspiración con el fin de impedir, obstruir o anular la función legal de cualquier departamento del Gobierno» y que López Bello – así como sus co-conspiradores- “actuó para evadir las sanciones de la OFAC”.
“Estas alegaciones son suficientes a los efectos de una alegación de conspiración”, se agrega en el texto de la decisión.
En agosto de 2022, López Bello logró que parte de su fortuna no fuera a parar a manos de tres victimas de un secuestro de las Farc, de acuerdo a la agencia AP. El Tribunal de Apelaciones del 11º anuló la orden emitida en 2020 por el juez federal de Miami, Robert Schola, que otorgó bienes de Samark López, “a tres antiguos contratistas de defensa estadounidenses retenidos durante años por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia”.
Piloto sentenciado en Nueva York fue informante en un caso en el que se menciona a El Aissami
