Luisa Ortega Díaz volvió a hablar. A un mes de haber conmocionado al país al afirmar que las últimas decisiones de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia contra la Asamblea Nacional habían supuesto una “ruptura del orden constitucional”, la Fiscal General de la República ha vuelto a pronunciarse, pero esta vez para pedirle a la dirigencia política del país que retome el diálogo y evite una guerra civil.
Informó la Fiscal General que durante las tres semanas de protestas que han sacudido al país, 26 personas han muerto, 437 han resultado lesionadas y 1.089 han sido detenidas, de las cuales hasta ahora 65 han sido enviadas a prisión provisional mientras se les investiga. Para evitar que la situación degenere en hechos de violencia más graves, Ortega Díaz pidió al chavismo y a la oposición volver a la mesa de diálogo, aunque no en las mismas condiciones que el fallido proceso del año pasado.
“Todos deben bajar el tono de la confrontación y elevar el nivel de las discusiones. Deben dejar de utilizar descalificaciones, deshumanizaciones del otro, solo por pensar distinto. Discursos racistas, xenófobos y descalificaciones no nos van a llevar a ningún lado”, afirmó la jefa del Ministerio Público.
“Requerimos volver al dialogo, con interlocutores válidos y con poder de decisión, para construir una agenda de acuerdos que permitan salidas democráticas e institucionales que resguarden al Estado de Derecho”, afirmó, al tiempo que agregó: “Nadie desea para nuestro país, y menos la que les habla, un escenario de confrontación bélica, una guerra civil y mucho menos una injerencia extranjera”.
Ortega Díaz no aceptó responder preguntas de las decenas de periodistas que este martes colmaron el auditorio principal del Ministerio Público, pero aprovechó para enviar mensajes a ciertos organismos, aunque no los mencionó directamente.
Al referirse al caso de los disturbios y saqueos ocurridos el pasado día 20 en la urbanización El Valle de Caracas, afirmó que cualquier hecho que atente contra la paz y tranquilidad del pueblo va ser investigado por el Ministerio Público. «Lo va investigar el Ministerio Público que es el que tiene la titularidad de la acción penal” dijo, en aparente alusión al Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y a la Procuraduría, organismos que en los últimos meses han citado a dirigentes opositores, sin contar su visto bueno.
El caso de los 38 jóvenes que fueron detenidos en Margarita por protestar y cuya liberación pidió, pero no le fue concedida por los jueces, le sirvió para cuestionar la actuación tanto del Poder Judicial como de los organismos de seguridad.
“En este caso nos encontramos con una situación anómala, por cuanto el CICPC (Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas) fue quien trasladó los aprehendidos, pero no conoce de la circunstancia que produjo tal actuación, porque los detuvo la Guardia Nacional y se los entregó (…) el CICPC solamente transcribió la identidad de los aprehendidos (en el acta policial), pero no narró las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que fueron aprehendidas las personas. ¿Qué estaban haciendo? ¿Cuál era la conducta que desarrolló la persona para aprehenderla? (…) entonces es difícil para el Fiscal investigar, determinar cuál es el delito que cometió una persona sino se lo describe en el acta policial (…) Esto impide imputar delitos por carencia de la más mínima información”, explicó.
Por último, le salió al paso a quienes desde el oficialismo le han pedido actuar contra las cierres de vías. “El orden público corresponde a otros organismos, cuando hay situaciones de calle, obstáculos en la vía, corresponde a los órganos de seguridad ciudadana actuar y no al Ministerio Público”.
El pronunciamiento de Ortega Díaz generó mucho interés, pues era la primera vez que la funcionaria hablaba desde el 31 de marzo, fecha en la que, durante la presentación de la Memoria y Cuenta 2016 del Ministerio Público, criticara la actuación del TSJ frente a la AN. Sin embargo de este asunto en esta oportunidad no hizo mención, así como tampoco sobre los rumores de su renuncia.