Transparencia Venezuela, 17 de enero de 2022.- La pelea judicial que Nicolás Maduro y Juan Guaidó libran en los juzgados británicos, por las 31 toneladas de oro que el Banco Central de Venezuela (BCV) tiene depositadas en el Banco de Inglaterra, continuará en 2022. ¿La razón? El Tribunal Supremo del Reino Unido ratificó que Juan Guaidó es reconocido por el Gobierno británico como el presidente “interino” de Venezuela, pero no consideró que sea él quién pueda disponer del material preciado; y, por ello, le encomendó a un tribunal de menor jerarquía que despeje esa duda.
La decisión del máximo juzgado se produjo el 20 de diciembre de 2021 y fue la respuesta al recurso que los representantes del Gobierno interino interpusieron para conseguir que la justicia del país europeo les entregue los fondos.
El Supremo declaró que no podía ser cuestionada por los jueces la decisión- emitida en febrero de 2019 por el Ejecutivo entonces presidido por la conservadora Theresa May, luego ratificada por el actual Gobierno del también conservador Boris Johnson- de considerar que Guaidó como presidente encargado de Venezuela. Sin embargo, el organismo decidió enviarle al Tribunal de Comercio el caso, para que este sea el que determine si las decisiones del Tribunal Supremo de Justicia venezolano, respecto a la junta directiva ad hoc designada por Guaidó y la Asamblea Nacional electa en 2015 pueden ser “reconocidos” en el Reino Unido.
Como recordará la Sala Constitucional, en su sentencia número 247 del 26 de mayo de 2019, declaró “nula de nulidad absoluta” los nombramientos hechos por el sector opositor, con el respaldo del Parlamento, y además los calificó como un “asalto al Estado de Derecho y a todos los Poderes Públicos”.
Desde cero
El Tribunal de Comercio ya tuvo el caso en un principio y fue el que, a mediados de 2020, declaró que Guaidó era el Jefe del Estado, pues así lo reconoció de manera “clara e inequívoca” el Gobierno británico un año antes.
Los abogados del BCV controlado por Miraflores rechazaron la decisión. “El reconocimiento del señor Guaidó va en contra de la realidad sobre el terreno. Sus designados no tienen capacidad para actuar en nombre del BCV de manera efectiva, ni para representarlo en ningún procedimiento legal internacional”, afirmó el abogado británico Sarosh Zaiwalla.
Pero el representante del Gobierno chavista no se quedó allí y advirtió que este fallo contra su cliente podría abrir las puertas a serias repercusiones para el Reino Unido. “Esta decisión se basa en una doctrina legal del siglo XIX y podría tener el efecto de validar un nuevo enfoque para el cambio de régimen, que tiene ramificaciones potencialmente graves y adversas para el Reino Unido como depósito seguro de activos soberanos”, agregó.
Un quinto del oro del mundo está en la capital británica y solo en las bóvedas del Banco de Inglaterra se estiman hay 5.000 toneladas del material preciado, que pertenece en buena parte a 30 bancos centrales.
El BCV controlado por Miraflores ha intentado hacerse con el oro con la excusa de vender una parte para adquirir medicamentos e insumos para combatir la pandemia del COVID-19, mediante un acuerdo con el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Sin embargo, la oposición rechaza movilizar estos fondos por considerar que se podrían perder en las redes de la corrupción o ser utilizados para adquirir medios para reprimir a los ciudadanos.