Transparencia Venezuela, 24 de septiembre de 2020.- Continúa la guerra legal que el chavismo ha iniciado contra el Banco de Inglaterra, para conseguir que le entregue parte del oro que el Banco Central de Venezuela (BCV) tiene depositado en sus bóvedas. La Corte de Apelaciones de Londres revisará la legalidad de la decisión de la Alta Corte de Comercio y Propiedad de Inglaterra y de Gales, que en julio pasado resolvió dejar en manos del diputado Juan Guaidó el destino de las reservas en oro del Estado venezolano y en cuestión de semanas podría estar emitiendo su opinión.
El proceso fue en respuesta a un recurso de apelación que los abogados del BCV controlado por la administración de Nicolás Maduro presentaron semanas atrás contra el dictamen de la Alta Corte de Comercio y Propiedad de Inglaterra y de Gales, que consideró que la junta directiva “ad hoc” del BCV nombrada por la Asamblea Nacional es la que tiene la legitimidad para pedir al Banco de Inglaterra movilizar o no las 31 toneladas de oro venezolano que tiene bajo su custodia, en virtud de la condición que tiene Juan Guaidó como presidente interino de la República, así reconocido por el Gobierno del Reino Unido.
Durante las audiencias, celebradas el 22 y 24 de septiembre, el abogado Leigh Crestohl, del bufete londinense Zaiwalla, pidió a la instancia de alzada anular la resolución judicial, por considerar que la misma representa una violación al principio de no intervención en los asuntos internos de un país soberano y, por lo tanto, quebranta el derecho internacional.
“Si el Gobierno del Reino Unido reconoció a Guaidó, lo hizo solo en un sentido de jure y dejó intacto el reconocimiento continuo del presidente Maduro como el presidente y Gobierno de facto en Venezuela cuyos actos, bajo los precedentes legales ingleses, se consideran efectivos”, agregó el jurista, quien sostuvo la decisión del 10 de Downing Street de reconocer a uno Gobierno u otro debe estar sometido a ciertos controles.
“Si el Gobierno de Su Majestad reconoce al embajador de Maduro, reconoce a Maduro, y la Corte debe seguir su ejemplo”, apuntó por su parte, el también abogado del BCV controlado por Miraflores, Nick Vineall.
Apelando a la realidad
Los abogados que representan al BCV controlado por Maduro pidieron a la Corte de Apelaciones que tome en cuenta la realidad.
“Este caso se basa en puntos puramente procedimentales y técnicos, divorciados por completo de la realidad de la situación sobre el terreno. El presidente (Maduro) y el Directorio del BCV en Caracas mantienen el control total y efectivo del BCV y sus instalaciones, y están llevando a cabo las funciones diarias del BCV. La llamada Junta Administrativa Ad Hoc ni siquiera reside en Venezuela y solo está interesada en reclamar autoridad sobre muy valiosos activos venezolanos en este país”, apuntó Crestohl, quien prosiguió: “Fue una decisión muy sorprendente de la Alta Corte de Comercio declarar que la junta ´ad hoc´ (del BCV), que está en el extranjero y que no tiene el control del BCV, y que fue nombrada por un ´presidente interino´ que no tiene control efectivo sobre el territorio o el aparato de Estado en Venezuela, debería ser reconocida en Londres como con autoridad para tratar con el oro venezolano depositado en el Banco de Inglaterra”.
Desde hace meses Maduro desea vender unos 1.000 de los casi 2.000 millones de dólares en oro que el BCV tiene en el Banco de Inglaterra desde 2008, bajo el argumento de que los fondos serán entregados al Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para adquirir alimentos y medicinas para enfrentar la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, el Banco de Inglaterra se ha negado a atender la petición, en virtud de las dudas en relación a quién es la autoridad venezolana que puede decidir la suerte del precioso material. El 4 de febrero de 2019 el entonces Gobierno encabezado por la primera ministra Theresa May reconoció a Guaidó como Jefe de Estado “interino”, uniéndose así a más de 60 países en el mundo que respaldan al parlamentario venezolano.
“El Reino Unido ahora reconoce a Juan Guaidó como presidente constitucional interino de Venezuela hasta que unas elecciones presidenciales creíbles se puedan celebrar”, señaló en su oportunidad el para la época ministro británico de Exteriores, Jeremy Hunt, quien agregó: “La opresión del ilegítimo y cleptocrático régimen debe terminar. Aquellos que continúan violando los Derechos Humanos de los venezolanos bajo un régimen ilegítimo deberán rendir cuentas. Los venezolanos merecen un futuro mejor”.
Pero no solo las dudas sobre quién es la legitimidad autoridad en Caracas han sido las razones esgrimidas por el Banco de Inglaterra para mantener el oro en sus bóvedas, sino también las sanciones que el Gobierno de Estados Unidos ha impuesto a funcionarios chavistas.
El fallo de la Corte de Apelaciones británica tendrá repercusiones en el conflicto político venezolano.