Transparencia Venezuela, 23 de enero de 2023.- Después de permanecer más de cuatro años tras las rejas, el exministro del Interior, Miguel Rodríguez Torres, ha sido liberado y ahora se encuentra en España. Pero cómo se produjo la excarcelación de quién en los últimos años pasó de ser el gran espía del fallecido Hugo Chávez a una de las principales amenazas para Nicolás Maduro.
La noticia comenzó a circular entre la noche del viernes 20 y la mañana del sábado 21 de enero de manera extraoficial. Sin embargo, la confirmación llegó horas después de la boca de familiares de quien también fuera director de la extinta Dirección de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip) y de su sucesor, el temido Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin).
#21ene | Miguel Rodríguez Torres: «He salido en libertad de lo que llamé la caja gris» https://t.co/ifxnDmpNHU pic.twitter.com/dC0bSINd0B
— El Nacional (@ElNacionalWeb) January 22, 2023
“Queremos informar al país, que en horas de la mañana del sábado 21 de enero del año 2023, (el exministro) fue liberado, luego de pasar 4 años y 10 meses injustamente preso”, se lee en el escrito, en el cual sus familiares agradecen las gestiones del expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero; del actual mandatario colombiano, Gustavo Petro; del secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin; del alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk; de la presidente del Parlamento Andino, senadora Gloria Flores; del presidente de la Asamblea Nacional electa en 2029, Jorge Rodríguez; de la vicepresidenta Delcy Rodríguez; del opositor Gerardo Blyde; del gobernador de Carabobo, Rafael Lacava; del diputado Timoteo Zambrano; del excandidato presidencial Henrique Capriles; de los exdiputados Stalin González y Carlos Paparoni; del Gobierno de los Estados Unidos de América; de las iglesias Católica y evangélica; de los periodistas y del abogado Carlos Matos Zerpa.
Más que un juicio, una negociación
Miguel Rodríguez Torres fue detenido el 13 de marzo 2018 por agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), mientras se encontraba en un evento en un hotel de Caracas de una organización política que había fundado. Las autoridades justificaron la medida señalando al oficial de estar complotando contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
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El exfuncionario fue recluido en los sótanos de los servicios secretos militares en Boleíta y luego fue enviado a Fuerte Tiuna.
Durante estos más de cuatro años el militar no fue enjuiciado por los cinco delitos de los que le señalaba el Ministerio Público Militar (atentar contra la seguridad de la nación, motín, espionaje, traición a la patria e instigación a la rebelión). Este retardo, el cual jamás fue explicado, supone en clara contravención de lo dispuesto en la Constitución de Venezuela y del Código Orgánico Procesal Penal (COPP).
Simultáneamente la salud del exministro Rodríguez Torres comenzó a deteriorarse y prueba de ello es que en 2020 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ordenó a las autoridades venezolanas garantizarle su vida e integridad.
A partir de allí el nombre de Miguel Rodríguez Torres entró en la agenda de las conversaciones que las autoridades mantienen con sus opositores y también con instancias internacionales.
“Hubo una negociación en la que medió Rodríguez Zapatero. El acuerdo consistía en que Rodríguez Torres admitía haber incurrido en el delito de instigación a la rebelión, mientras que los otros cuatro delitos le serían retirados (sobreseídos). Así lo condenaron por un delito, pero salió en libertad plena porque ya había cumplido la pena”, relató a Suprema Injusticia una fuente cercana al oficial.
¿Reconoció que estaba conspirando contra el Gobierno? “Eso ya no importa. Si no hacía esto, se muere preso como ya le ocurrió (a el exministro de la Defensa, general Raúl) Baduel”, zanjó el confidente.
La información fue corroborada desde el Ministerio Público intervenido por la extinta Constituyente, donde afirmaron: “Sí él admitió que estaba instigando a militares a rebelarse”.
En aplicación de este pacto antes mencionado, el exministro Miguel Rodríguez Torres fue trasladado el viernes a los tribunales militares para celebrar la audiencia de juicio de manera expedita. Allí el oficial confesó y fue condenado al mismo tiempo que ya tenía tras las rejas. Pese a que se emitió una boleta de excarcelación, Rodríguez Torres no pudo salir libre inmediatamente, porque fue llevado al hospital para una revisión médica.
Según fuentes familiares ,hace poco finalizó audiencia de presentación de Miguel Rodriguez Torres en la Corte Marcial .La juez del Tribunal 1 de control en casos de terrorismo decidió ponerlo en libertad luego de que el Ministerio Público solicitara anular la orden de captura .
— Vladimir Villegas (@Vladi_VillegasP) January 21, 2023
Excarcelado, pero fuera de Venezuela
La segunda parte del acuerdo para excarcelar al exministro incluía que Rodríguez Torres saldría del país inmediatamente con destino a España. Algo parecido a lo que hace cuatro años le ocurrió el opositor Lorent Saleh.
La medida viola flagrantemente lo dispuesto en el último aparte del artículo 50 de la Constitución de 1999, el cual señala: “Ningún acto del Poder Público podrá establecer la pena de extrañamiento del territorio nacional contra venezolanos”.
Obviamente este acuerdo de expatriar a Rodríguez Torres no quedó por escrito.
Ola de represión
Miguel Rodríguez Torres fue el primer ministro del Interior de Maduro y fue el responsable de reprimir la ola de protestas antigubernamentales que estalló en el país el 12 de febrero de 2014 y que fue denominada como “La Salida”.
Sin embargo, con el paso del tiempo sus relaciones con el gobernante se fueron deteriorando.
Fuentes cercanas al exfuncionario sostienen que Maduro temía a la popularidad de la que entonces gozaba el oficial entre las bases chavistas. No se puede olvidar que Miguel Rodríguez Torres participó en la asonada del 4 de febrero de 1992, junto al fallecido Hugo Chávez y fue uno de sus más estrechos colaboradores.
Un procedimiento contra un colectivo armado en Caracas por parte de los cuerpos policiales, en el cual se registraron varios fallecidos, fue la excusa de Maduro para despedir a Rodríguez Torres, quien no obstante continuó fungiendo como profesor en la Academia Militar durante un tiempo.
Meses después el oficial comenzó a criticar públicamente el desempeño del Gobierno y poco tiempo después fue arrestado.
El director de Fundaredes denunciará en su reiniciado juicio las torturas que ha sufrido
