Transparencia Venezuela, 20 de mayo de 2024. Gladys Gutiérrez es de esas personas que no quiere “quedarse sin el chivo y sin el mecate”. Y prueba de ello es que la expresidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) seguirá siendo magistrada del máximo juzgado, pese a que ya se encuentra ejerciendo plenamente sus funciones como embajadora de Venezuela en España.
Es la tercera vez que el TSJ le permite a Gladys Gutiérrez ejercer otro cargo remunerado sin perder la condición de integrante de la más alta instancia legal en Venezuela.
La funcionaria no tuvo renunciar a su silla en la Sala Constitucional para asumir como embajadora de Venezuela en España, porque la Sala Plena del TSJ le concedió un nuevo permiso para desempeñar sus funciones diplomáticas. Así lo anunció la Sala Constitucional, instancia encargada de interpretar la Constitución venezolana en su sentencia número 208, de fecha 17 de mayo de 2024.
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“El 3 de abril de 2024, la Sala Plena de este Alto Tribunal otorgó licencia a la magistrada doctora Gladys María Gutiérrez Alvarado”, se lee en el dictamen, en el cual se declaró “sin lugar” un recurso contencioso tributario que la Agropecuaria La Costanera C.A. interpuso contra el Servicio Nacional Integrado de Administración Tributaria (Seniat).
La decisión del TSJ de permitir a Gladys Gutiérrez desempeñar otro cargo en la administración pública, sin renunciar a su puesto en el máximo juzgado o sin perderlo automáticamente, va en contra de lo establecido en el artículo 148 de la Constitución de Venezuela.
Esta norma señala:
“Nadie podrá desempeñar a la vez más de un destino público remunerado, a menos que se trate de cargos académicos, accidentales, asistenciales o docentes que determine la ley. La aceptación de un segundo destino que no sea de los exceptuados en este artículo implica la renuncia del primero, salvo cuando se trate de suplentes, mientras no reemplacen definitivamente al principal”.
Por su parte, el artículo 39 de la Ley Orgánica del TSJ estipula claramente cuáles son los límites en el ejercicio como magistrada o magistrado:
“Las Magistradas o Magistrados podrán ejercer cargos académicos y docentes siempre y cuando no sea a tiempo completo o no resulten incompatibles con el ejercicio de sus funciones, y ser miembros de comisiones codificadoras, redactoras o revisoras de leyes, ordenanzas y reglamentos que, según las disposiciones que las rijan, no constituyan destinos públicos remunerados”.
¿Quién sustituirá a Gladys Gutiérrez?
En el dictamen de la Sala Constitucional del TSJ en el que se anuncia la “licencia” de Gladys Gutiérrez no se aclara otra duda importante: ¿Quién la sustituirá?
En la sentencia ya mencionada el nombre de la ahora embajadora sigue figurando entre los firmantes y no aparece el tradicional pie de página que advierte que uno de los magistrados no suscribió la decisión por “motivos justificados”.
La lógica indica que uno de los cuatro magistrados suplentes debería ser convocado.
Sin embargo, no se puede olvidar que existe la posibilidad del regreso del magistrado Calixto Ortega, quien también recibió una licencia para ocupar la embajada ante la Corte Penal Internacional (CPI) y la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ), cargo del que fue removido a finales del año pasado.
Una experta en ir y volver
La embajada en España será el tercer cargo que Gladys Gutiérrez desempeñará sin perder su condición de magistrada desde 2020. A mediados de ese año, la Sala Constitucional la designó como rectora ad hoc del Consejo Nacional Electoral (CNE) y meses después el presidente Nicolás Maduro la nombró embajadora ante la CPI y la OPAQ, un cargo que ocupó por cuestión de meses. En esa ocasión el TSJ también le otorgó un permiso especial para desempeñar ambas funciones.
El 26 de abril de 2022, la Asamblea Nacional reeligió a la expresidenta del TSJ para un nuevo período de 12 años y casi a dos años de esta cuestionada decisión (la Constitución sólo permite un período) Maduro escogió a la funcionaria como su embajadora ante el Gobierno español.
Un día antes de que saliera la sentencia de la Sala Constitucional anunciando su “licencia”, Gutiérrez completó su proceso de acreditación ante las autoridades españolas al entregarle sus cartas credenciales al rey Felipe VI, confirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado de prensa.